lunes, 9 de abril de 2012

52 operaciones en 25 años: la asombrosa transformación de la plusmarquista mundial de cirugía estética

¿Existe el Record Guinness de intervenciones de cirugía estética? Existe, por supuesto, y lo ostenta una mujer de 57 años que aparenta…bueno, 57 años muy bien llevados. Cindy Jackson es una norteamericana afincada en Londres que desde hace 25 años dedica dos semanas anuales y unos cuantos miles de euros a “hacerse unos retoques”, incluyendo cinco liftings faciales, otros dos de ojos, reestructuración de la mandíbula, liposucciones masivas e implantes mamarios y Botox como para llenar un barreño mediano.

La carrera por el cuerpo y la cara perfecta de Cindy Jackson, soltera y sin hijos, comenzó en 1986, cuando su padre murió de cáncer y le dejó 8.000 euros de herencia, según el profuso perfil que elabora de ella el tabloide The Sun. La “chica del montón” que era entonces decidió transformarse en un bellezón y para ello estudió las teorías sobre la belleza femenina de artistas como Miguel Ángel y Leonardo da Vinci:

“Ellos usaban unas medidas y proporciones muy precisas para representar la belleza. Por ejemplo, sabían que los ojos debían separados entre sí y de la barbilla a una cierta distancia. Entonces me di cuenta de que no era bella porque todas mis proporciones eran erróneas. Tenía una nariz enorme y una barbilla prominente”.

Desde entonces, ha gastado más de 50.000 euros en alcanzar el ideal renacentista de belleza.

Según relata la neumática mujer, “tardé 15 años en cumplir mi lista de deseos. [Para ello] contraté a los mejores cirujanos de tres continentes, con operaciones en EEUU, Australia y Reino Unido”. Gracias a semejante despliegue (y desembolso), en 1999 entró en el Libro Guinness de los Records como la mujer más operada del planeta, un cetro que lleva ostentando ininterrumpidamente desde aquel entonces.

Pero no hace falta irnos hasta la Pérfida Albión para encontrar “bombones” de edad provecta gracias a un pacto con el diablo y/o con el cirujano. Nuestra Ana Obregón, que “cumple cincuenta y siete en marzo, según las fuentes más piadosas”, escribe Luis Sánchez-Mellado en El País, nos regala esta declaración desde las revistas del corazón:

“En­­tiendo que a las cuarentonas se nos acerquen los veinteañeros. Una mujer hecha y dere­­cha tiene que gustarle a un hombre”.

1 comentario:

  1. no se que es lo que me das mas miedo, su idea estúpida y narcisista de lo que es la belleza, o la cantidad de operaciones que lleva. aun así esto no deja de ser estúpidamente sorprendente.

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